Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber:
así acumulas carbones encendidos sobre su cabeza y el Señor te recompensará.
El viento del norte engendra la lluvia y la lengua simuladora, un rostro irritado.
Más vale habitar en un rincón del techo que compartir la casa con una mujer pendenciera.
Agua fresca para una garganta reseca es una buena noticia que llega de un país lejano.
Fuente enturbiada y manantial contaminado es el justo que vacila ante el malvado.
No es bueno comer mucha miel ni buscar excesivos honores.
Ciudad desmantelada y sin muralla es el hombre que no domina su genio.
así acumulas carbones encendidos sobre su cabeza y el Señor te recompensará.
El viento del norte engendra la lluvia y la lengua simuladora, un rostro irritado.
Más vale habitar en un rincón del techo que compartir la casa con una mujer pendenciera.
Agua fresca para una garganta reseca es una buena noticia que llega de un país lejano.
Fuente enturbiada y manantial contaminado es el justo que vacila ante el malvado.
No es bueno comer mucha miel ni buscar excesivos honores.
Ciudad desmantelada y sin muralla es el hombre que no domina su genio.